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CONSULTAS

Inicial

Si finalmente reservas, esto es lo que vamos a hacer:

En la primera hora de consulta hacemos una historia clínica y te preguntamos mil cosas, pero sobre todo qué cosas quieres trabajar, porque igual me cuentas que tienes 3 problemas y yo podría ayudarte con los 3, pero tú sólo quieres trabajar uno de ellos porque no te sientes preparad@ para el resto, así que yo desde el respeto más absoluto solo abordamos el tema que tú quieres trabajar. Estamos especializadas en el abordaje nutricional de los trastornos de la conducta alimentaria, pero no somos muy partidarias de las etiquetas. Así que si sientes que necesitas ayuda con tu relación con la comida sin la necesidad de ponerle ningún nombre en concreto, estamos especializadas en eso también.

Como no tenemos la cabeza separada del cuerpo, somos plenamente conscientes de que en consulta a veces coinciden varias problemáticas que requieren de abordajes nutricionales diferentes. Como los atracones y el síndrome de ovario poliquístico, o la rigidez alimentaria y el sobre crecimiento bacteriano (son ejemplos aleatorios). Para las patologías hormonales también estamos formadas, pero para las digestivas preferimos derivaros a compañeras con más experiencia. Así que si es tu caso, escríbenos primero para que te podamos orientar.

Una vez que tenemos la historia clínica y que establecemos juntas qué cosas vamos a trabajar vamos creando los materiales de cada consulta.

Seguimientos

Las siguientes consultas se harán cuando tú lo necesites, lo acordaremos entre las dos, si tienen que ser cada semana, cada dos semanas o mensuales. Lo que sí es imprescindible es realizar una primera revisión en las siguientes dos semanas tras la consulta inicial, para que una vez establecido lo que queremos trabajar, puedas leer tranquilamente el material y puedas consultarnos todas las dudas que tengas.

Hablamos de cultura de dieta y de los cánones de belleza y de cómo eso afecta a nuestra alimentación.

Hablamos también de los grupos de alimentos y de sus funciones para encontrar qué alimentos pueden mejorar ciertas demandas, por ejemplo imagínate que tienes estreñimiento/diarrea o cualquier patología digestiva, pues podemos ver qué alimentos te gustan y dentro de eso cuáles te resulta más fácil y accesible comprar o consumir en tu día a día para mejorar esos síntomas. Igual fijamos como objetivo aumentar el consumo de fibra para que vayas mejor al baño pero no te gusta el pan integral, pues buscamos otros alimentos ricos en fibra que puedan encajar.

Una parte muy importante de la consulta se centrará en desmitificar creencias sobre los alimentos, quitarle el valor moral a la comida y dejar de hablar sobre alimentos buenos o malos.

Trabajaremos la restricción hablando sobre el permiso incondicional, porque eso de no tener los alimentos en casa para no comerlos, no es la mejor idea.

Si todo esto te suena muy raro, sigue leyendo, es un poco largo, pero merece la pena que entiendas nuestro enfoque.

¿Qué puedes esperar y qué no?

¿Qué puedes esperar de mis consultas?

  • Asesoramiento personalizado: Cada persona es diferente, por lo que adapto mis recomendaciones a tus necesidades específicas.
  • Alimentación sin restricción: Aprenderás a conocer y entender tus necesidades a través del permiso incondicional.
  • Salud en todas las tallas: Enfocamos nuestros esfuerzos en mejorar tus hábitos y tu calidad de vida, sin centrarnos en el peso. En esta consulta no juzgamos a las personas por su corporalidad, orientación sexual, color de piel, capacidades, etc. (Que debería ser lo mínimo indispensable en cualquier consulta).
  • Educación y empoderamiento: Te proporcionaré la información y las herramientas necesarias para que tomes decisiones informadas sobre tu alimentación.

¿Qué NO puedes esperar de mis consultas?

  • Que de ninguna forma trabajemos la pérdida de peso. Te lo desarrollo más adelante para que puedas entenderlo bien, pero necesito dejarlo claro ya desde el principio para que tus expectativas se ajusten a los servicios que ofrecemos y todas nos sintamos cómodas. Ni pérdida de peso respetuosa ni leches.
  • Repito, que a veces no queda claro: NO TRABAJO LA PÉRDIDA DE PESO.

Cosas que necesito que queden claras antes de empezar

  • Este es un proceso diferente al establecido o al tradicional con respecto a otras consultas de nutrición, ya que no nos centramos en el peso ni en la pérdida de peso, porque perder peso, no nos garantiza ganar salud.
  • Como a mí ya me has oído decirlo muchas veces, y es probable que la forma en la que me explico no termine de entenderse del todo bien, quiero leas el siguiente artículo y después vuelvas a este texto y sigas leyendo.
  • Espero que hayas llegado a la conclusión clara de que perder peso no te va hacer ganas salud ni va a mejorar tus dolores. Es más, perder masa muscular durante un proceso de adelgazamiento va a empeorar esos dolores porque debilita tu musculatura. Para mejorar ese dolor, la postura y la movilidad, la mejor opción es hacer ejercicio, ganar masa muscular y fortalecer los puntos clave que están causando ese dolor. Y esto nos da una razón más para comer, incluso para comer más, porque para construir masa muscular, se necesita comida. Es ridículo pensar que existe un alimento que mágicamente va a curarte un dolor, ojalá fuera así porque entonces estaría encantada de decirte cuál es. Si tu alimentación no cubre tus necesidades, es imposible que ganes masa muscular.
  • Quiero decir que si no comes suficiente, no consigues aumentar tu masa muscular, pero tampoco adelgazar. Cuando no comemos lo suficiente por estar a dieta o por restringir comida, incluso porque no nos da la vida para cocinar, tu cuerpo lo entiende como una emergencia y activa mecanismos de supervivencia que te hacen acumular grasa para sobrevivir y protegerte.
  • Y esto es maravilloso, porque por mucho que tu intentes ir en contra de tu cuerpo, maltratarlo y machacarlo con dietas, él sigue manteniéndote viv@. Por desgracia no conseguimos verlo así, no conseguimos ver engordar como algo bueno porque la sociedad nos ha metido en la cabeza que es lo peor del mundo.
  • Así que llegamos a una segunda conclusión importante. Hacer dieta o restringir, solo va a conseguir que tu cuerpo siga igual o acumulando grasa. Por eso me molesta tanto cuando alguien habla sobre alimentación o sobre el peso corporal sin tener ni idea. Lanzan el mensaje simplista de que si comes menos y haces más ejercicio, adelgazas, y no es verdad. Nuestro peso fluctúa por muchas razones, es imposible controlarlo y es contraproducente para nuestra salud mental.
  • Si fuera tan fácil estar delgada y joven eternamente, TODO el mundo estaría delgado y joven, porque nadie quiere tener un cuerpo con el que no se siente a gusto o siente que le juzgan. Literalmente, dan ganas de llorar cuando te das cuenta de que quizá nunca vuelvas a tener el cuerpo que tenías hace 20 años, pero es que tú ya no eres la misma persona que hace 20 años, y tu sistema endocrino, cardiovascular, digestivo, etc, tampoco. Sería rarísimo tener el mismo cuerpo que tenías con 15 años, la vida pasa, y el cuerpo cambia. Aunque la sociedad nos quiera hacer creer que no, que solo existen personas jóvenes y delgadas. El negocio de las insatisfacciones funciona genial, porque así todas las personas gastan dinero en dietas, batidos detox, tintes para el pelo, fajas, etc.
  • La cultura de la dieta ha conseguido que veamos feas a las personas gordas, cuando el tamaño corporal no tiene nada que ver con la belleza, ya que ésta, es subjetiva, por mucho que nos quieran hacer creer que solo las personas jóvenes y delgadas son bellas.
  • Incluso lo han justificado como que la gordura no es saludable y que es culpa de el sedentarismo y los ultraprocesados, o sea, de los tiempos modernos, cuando ha habido cuerpos gordos desde siempre. Te dejo un vídeo para que le eches un vistazo y luego sigas leyendo.
  • Hasta aquí quiero que queden claros dos puntos, que hacer dieta o restringir no mejora la salud y que el deseo de adelgazar o de perder peso no nace de dentro de ti, si no de la cultura y la sociedad que ha posado sobre nuestros hombros la presión estética.
  • Entonces, llegados a este punto, tú te tienes que estar preguntando: ¿entonces qué hago, me conformo? ¿no hago nada?
  • Yo no comparto para nada ese pensamiento. En mi consulta no hablamos de conformarnos y no hacer nada, porque eso sería ni siquiera pensar en hacer consulta o en aprender nada y tú ya estás haciendo, intentando y aprendiendo un montón de cosas.
  • Para poder aprender sobre grupos de alimentos, sobre recetas, sobre alimentación consciente, sobre sensaciones de hambre y de saciedad, etc, hay que tener también presente que todo esto no lo hacemos para que adelgaces, si no para que tu salud mejore. Y son muchas cosas, cosas importantes que te van a servir a largo plazo para mantener la salud y un estilo de vida sostenible y con el que te sientas cómod@. Pero es imposible que seas consciente del proceso de aprendizaje y de la importancia que tiene si desde la consulta de psicología no se trabaja en aceptación corporal.
  • La aceptación no significa conformarse, se refiere a la actitud positiva y respetuosa hacia el propio cuerpo, independientemente de su forma, tamaño o apariencia. Implica aceptar y valorar el cuerpo tal como es, en lugar de basar la autoestima y la valía personal en la conformidad con estándares de belleza culturalmente impuestos.
  • La aceptación corporal no significa resignarse a un estado de salud poco saludable, sino más bien adoptar un enfoque integral hacia el bienestar que prioriza la salud física, emocional y mental sobre la apariencia externa. Se trata de reconocer la diversidad de formas y tamaños corporales, y entender que la valía de una persona no está determinada por su aspecto físico.
  • Algunas características de la aceptación corporal incluyen:

    • Respeto: Valorar y respetar tu cuerpo como un aspecto integral de tu ser.
    • Autenticidad: Ser auténtica contiga misma y aceptar tu cuerpo, sin tratar de cambiarlo para cumplir con estándares externos.
    • Autocompasión: Tratar a tu cuerpo con compasión y respeto, especialmente en momentos de dificultad o autocrítica.
    • Libertad: Sentirte libre de la presión de alcanzar un ideal de belleza irrealista y centrarte en vivir una vida plena y significativa.

    La aceptación corporal es un proceso continuo que puede requerir trabajo consciente y práctica, especialmente en una sociedad que a menudo promueve estándares de belleza poco realistas. Sin embargo, cultivar la aceptación corporal tiene beneficios significativos para la salud emocional y el bienestar general.

    Mi responsabilidad es contarte la teoría porque como te digo, la práctica corresponde a las psicólogas, pero te dejo algunos ejemplos para que entiendas a qué me refiero.

    • Cambia tu enfoque: En lugar de centrarte en adelgazar, enfócate en llevar un estilo de vida saludable. Esto implica comer suficiente, hacer ejercicio regularmente y cuidar tu bienestar emocional y mental.
    • Practica la autocompasión: Reconoce y acepta tus pensamientos y sentimientos sin juzgarte a ti misma. Trátate con amabilidad y comprensión en lugar de ser dura contigo misma.
  • Cuida tu diálogo interno: Observa los mensajes que te dices a ti misma sobre tu cuerpo y trabaja en cambiar los pensamientos negativos por otros más positivos y realistas.
  • Identifica tus valores: Reflexiona sobre lo que realmente es importante para ti en la vida más allá de la apariencia física. Esto puede ayudarte a encontrar una mayor satisfacción y sentido de plenitud.
  • Rodéate de personas “seguras”: Mantén relaciones con personas que te apoyen y te acepten tal como eres, y evita aquellas que fomenten la comparación o la insatisfacción corporal.
  • Cuestiona los estándares de belleza: Reconoce que los estándares de belleza son subjetivos y culturalmente influenciados. Trabaja en desafiar las normas irracionales y poco realistas que te puedan afectar.
  • Busca ayuda profesional si es necesario: Si encuentras difícil superar tus preocupaciones sobre tu imagen corporal por ti mism@, considera buscar ayuda de una psicóloga que pueda ayudarte a trabajar en estos problemas más profundamente.

Recuerda que aceptarte a ti mism@ tal como eres es un proceso continuo y lleva tiempo. Sé paciente contigo mism@ y date el permiso para crecer y cambiar a tu propio ritmo.

La salud es una cosa SÚPER AMPLIA, y es mucho más importante que comas, porque lo contrario es obsesionarte con qué es más ecológico, qué es más saludable, qué es mejor, qué adelgaza más, etc. Y eso es un infierno.

  • En resumidas cuentas, adelgazar puedes adelgazar con cualquier remedio, puedes probar 100 métodos, pero ninguno te garantiza que el peso se mantenga a largo plazo ni que sea más saludable que trabajar en tus hábitos desde ya mismo, sin tener que obsesionarte primero con adelgazar.
  • Yo no tengo la verdad absoluta, ni quiero llevar la razón en todo, mi forma de trabajo también cambia y evoluciona y reconozco que me puedo equivocar y, de hecho, me equivoco en muchas cosas, trabajo priorizando siempre vuestro bienestar y procuro que terminéis este proceso con más calidad de vida y menos estrés.
  • Si no vienes con tu propia psicóloga, buscaremos una que encaje con lo que necesitas, no siempre es necesario, pero en la mayoría de los casos el trabajo debe ser conjunto entre nutricionistas y psicólogas.
  • Todo esto son ejemplos, en tu caso habría que ver qué cosas quieres trabajar, pero bajo ningún concepto hay dietas, ni menús cerrados, ni restricciones, ni me importa cuánto pesas o qué comes.